ORTEGA - RAUL, UN PACTO DIABOLICO

EL CARDENAL RISUENO Y EL REGRESO A LAS ANDADAS
Por Andrés Pascual

Ni con Tin Tan se podría reír tanto y tan bueno alguien como Monseñor Jaime Cardenal Ortega y Alamino con Raúl Castro; fue fascinación y lo demás es bobería lo que logro con sus cuentos Raúl; porque, para estar en todos los planos con una sonrisa de oreja a oreja, tienen que haber sido cuentos y posiblemente “picantes” lo que escucho extasiado el delegado de Castro en el colegio cardenalicio.

Resulta que al sanguinario menor se le ocurrió sentarse con el cardenal sobre, dice Ortega, presos, Cuba y quien sabe que mas…

¿Sera un paso positivo de la “apolítica” iglesia cubana en el respaldo a la libertad de Cuba? No, ¿Por qué? ¿Acaso hace lo mismo con los luchadores anticastristas esta iglesia que lo que hizo la de la década de los 50’s con los únicos enemigos de la Republica en toda su historia? Ni sonarlo. Pérez Serantes y Ortega tienen aspectos comunes; tal vez desagradables e impropios de su jerarquía e institución; pero el obispo que protegió al 26-7 fue más valiente que este cardenal, del que nadie hasta ahora conoce que denuncie públicamente ni el crimen ni la represión a que somete Castro a sus opositores.

Jamás ha acusado públicamente a la tiranía de asesina, previo o posterior a un fusilamiento; ni la ha calificado de represora después de sancionar injustamente a hombres y mujeres que solo hablaron o escribieron algo contra la gestión terrorista que asfixia al país. Dicen que para semejante cobardía patriótica lo apoya y protege el Papa con lo de “no inmiscuir a la Iglesia en asuntos políticos”, solo que, aparentemente, Polonia hizo una diferencia y la Kos Kor y Solidaridad llegaron a Europa enviados de Marte… ¡Que barbaridad!

¡Ah, pero el nuevo matarife a cargo de la carnicería se sentó con el cardenal y habló, nunca debe decirse hablaron, que la sonrisa de Ortega no le permitía articular palabra por hipnosis ni esos engendros acostumbran a “dialogar” con “productos cubanos”, de los presos, de la libertad de estos y, casi seguro, de nada que tuviera que ver con derechos humanos y soberanía individual y nacional, a través de la palabra democracia.

La supuesta conversación entre Ortega y Raúl ha confundido a mucha gente, incluidos los presos de nueva factura en Cuba; a sus familias, que no saben que ese presidio existe como elemento rehén de la dictadura para intercambios de cualquier tipo; se ha practicado por 30 anos y consistió siempre en utilizar desde aquí las visitas allá de personalidades internacionales, izquierdistas o no, de algún sector interesante para solicitarle la liberación de grupos de presos políticos al tirano que, una vez en Cuba y en control el propio Castro de las solicitudes, se encargaba de entregar un mínimo de mínimos de los solicitados y nunca los que constaban en las peticiones, sino otros menos emblemáticos; así, nunca José Carreño, ni Falcón, ni San Román, ni Ernesto Díaz Rodríguez, ni Juan José Sánchez, Roberto Martin Pérez, Ángel de Fana, Hernández Infante o Peñalver y si grupos de jovencitos que se dedicaban a romper teléfonos en cualquier barrio de La Habana; o a robar cajas de luces de bengala en almacenes militares para venderlas en el bajo mundo habanero que, para provocar y contaminar el presidio político, los juzgaban en tribunales del DSE como saboteadores contra “los poderes del estado socialista”.

Después EFE comentaba del gesto de buena voluntad del tirano, como aquel en que lib
ero a 16 de 100 o mas solicitados con sanciones entre 1-5 y muy poca credibilidad política y esto fue así, no de otra forma.

Hasta el oceanógrafo Jacques Costeau llevo su listica en 1986 y le dieron un grupito de los que varios viajaron a España, la mayoría pertenecientes a causas de “piratería marítima” con nombres como “la del cometa de Isla de Pinos” o “el remolcador de Regla”. Los pusieron en libertad justamente el Día de las Madres de ese ano. Este relajo lo inicio en 1978 el grupo procastrista conocido como “los 75 de la comunidad cubana en el exterior” que incluyo a algunos vendidos a la inteligencia castro comunista como Napoleón Vilaboa, Bernardo Benes o el cura Manuel Espinosa, que convirtieron Miami en un “resort” para oficiales de la inteligencia castro comunista como Tony de la Guardia y quien sabe quienes mas.

Una carta firmada por mas de 60 presos del Presidio Político Histórico proceso Calzoncillos, se convirtió en la mas alta expresión de la moral patriótica continental en 1979; porque rechazaron cualquier trato que involucrara su libertad con gestiones del grupo de Miami y del presidente Carter; todos tenian 15 o mas anos cumplidos y con igual cantidad y mas por cumplir, por lo que continuaron extinguiendo sus bárbaras e injustas condenas hasta la liberación, en 1991, de Mario Chanes de Armas, con 30 anos uno sobre el otro.

¿Por qué Raúl Castro ha accedido a tratar lo de los presos con alguien tan apático, pusilánime y desprestigiado como Ortega? Porque ya ninguna personalidad como no sean “sus aliados” visitan Cuba; por tal razón, no hay nadie a quien pedirle que intervenga por la libertad de los presos que sea de prestigio e interés para sus intenciones. Además, de todo el mundo, las personalidades ayer visitas frecuentes a Cuba, algunas de izquierda y comprometidas con la defensa del castro comunismo, lo que piden hoy, por su propia cuenta, es la liberación absoluta de todos los presos.

En lugar fácilmente comprensible, el concepto rehén sobre el preso político cubano ya es inoperante y arcaico; porque el gobierno americano no considera igual el rango de los prisioneros cubanos que el de los cinco espías de la Red Avispa y porque ya no le dan el crédito a Castro para que pregone y propagandice un cambio de “sus espías” por disidentes y opositores a los que presentarían como soldados de la CIA desde La Habana.

La tiranía, para aplacar el fuego a que se ha visto sometida con la represión a las Damas de Blanco y el asesinato de Orlando Zapata, va a liberar posiblemente a algunos presos, enfermos o no, a los que, quizás, se les comprometa a abandonar Cuba. Seria bueno recordar que de 1985 hacia atrás los presos políticos enfermos de cáncer, de problemas cardiacos, hepáticos, renales…no iban a hospitales ni eran puestos en libertad humanitaria, sino que morían en sus celdas sin tratamiento medico alguno.

El cambio en los tiempos ha sido tan grande que alrededor de 200 prisioneros políticos tienen contra la pared a una tiranía que fusilaba montones de inocentes diariamente y tan cerca como en 1985, tenia encarcelados a mas de 2000 hombres y mujeres y nadie escuchaba. Todavía era “la niña de los ojos del proletariado”; el mayor botín de la Unión Soviética y maestro en experimentar el concepto “preso rehén” para engañar como gesto de buena voluntad a quien se dejara.

Hoy, con los presos allí, tiene una sola alternativa: soltarlos y descubrir con tal acción no su buena voluntad; sino la debilidad más absoluta como régimen de represión y muerte. Y no hay otra alternativa.

Miami, FL., USA
06/07/2010