sábado, 2 de enero de 2010

UN CUBANO TAMBIEN LE ESCRIBE A URIBE


Leída detenidamente la carta de un ciudadano venezolano dirigiéndose al presidente colombiano, Alvaro Uribe, me embulla a decir algo sobre ese auténtico y democráta presidente al cual admiro por su forma de dirigir y representar su querido país, Colombia.

Los logros alcanzados durante su gobierno han sido relevantes y en su mayoría aprobados por su pueblo ya que goza de una inmensa popularidad dentro de los colombianos dentro y fuera del país. El gabinete escogido ha sabido llevar a vía de hechos muchas tareas y acciones postivas para Colombia destancándose el enfrentamiento frontal contra los movimientos guerrilleros FARC y ENL, bandos actualmente unidos promotores del narcotráfico internacional. La opinión pública mundial lo considera un gran presidente suramericano pero como siempre decimos todo tiene compensación y desbalance.

Casí transcurridos dos periodos presidenciales alguien propuso y el Congreso aprobo una tecera relección para el presidente Uribe. Dicen que hasta ahora él personalmente no ha aceptado dar ese paso. La prensa informa que las encuestas vivas dicen ¡Sí! aunque otras voces dentro de la oposición no lo apoyan mas también algunos simpatizantes y personalidades del oficialismo ven ese paso un poco arriesgado y contraproducente.

Ocho años en el poder es suficiente para cualquier persona al frente de un estado. Más constituye siempre una forma de acostumbrarse a seguir mandado y los demás continuar obedeciendo.

Las frágiles democracias que llegaron al poder por la vía electoral han minado el resto de los poderes (legislativo y judcial) y subyugadas las instituciones democráticas del país comenzando a implantar gobiernos absolutistas, popuistas con pérfiles totalitarios. Caso Venezuela, Bolivia, Nicaragua, Ecuador y una Argentina y Paraguay totalmente corrompida economicamente. Y el ejemplo de ese fenómeno en el continente es Cuba que acaba de cumplir 51 años de dictadura.

A mi críterio el presidente Uribe no debe aceptar esa tercera reelecciñon y no romper él lo ya instuido en el país que son un primera elección y una sola reelección. Ocho años de presidente es suficiente para darle paso a otra persona. O es que Colombia solo tiene al Sr. Alvaro Uribe.

Si todos los paises de nuestro hemisferio miran al Norte observarían que la constitucion norteamericana es un ejemplo. Un elección y una reelección solo permitida es lo aconsejaba para garantizar un democracia fuída. Sigamos el ejemplo de Estados Unidos donde nunca se ha visto un golpe de estado militar, ni un aborto a la democracia y donde se celebran elecciones presidenciales cada cuatro años.Desde su primer presidente, George Washington (1789-1796) dos periodos hasta George W. Bush (2001-2008) igual tiempo han pasado por la Casa Blanca 43 mandatarios sucesivamente acumulado unos 220 años de presidentes más el un año que cumplirá el presidente Barrak H. Obama el próximo 14 de enero del 2010.

Y repito por la salud política y democrática de la República de Colombia el presidente Uribe no debe reelegirse y concluído su segundo mandado irse a su residencia particular. Ronda una frase que comumente repetimos que es "cuando una persona se acostumbra mucho tiempo a mandar hace que muchos se acostumbren a ser obedientes" y al final eso no es positivo.

Miami, Florida, USA.
joselmartel@hotmail.com

ANATOMIA DE UN PROYECTO


Mucho se ha escrito sobre la problemática del transporte público en nuestro condado Miami-Dade. Algunos, los más, desean incrementar el número de buses circulando por nuestras calles, liberándonos de utilizar nuestros autos. Los que se enfrentan a esto aducen varias razones: primero, congestionarían aún más el endemoniado tráfico ya existente; segundo, hay quienes dicen que parte del sueño americano es también tener un auto y si la esposa trabaja, pues también el suyo, posiblemente hasta el del hijo graduado de High School. Entonces, ya hablamos de ¡tres autos! en una familia.

En otras palabras, para qué preocuparnos tanto por el transporte público cuando nuestra meta suprema en una sociedad capitalista desarrollada es disfrutar, algún día, de las comodidades que nos ofrece: la casa propia, los autos y hasta un bote “parqueado” a un costado del jardín...aunque sea solo para deslumbrar a los vecinos...

El problema es que los casi 3 millones de habitantes del condado, aún cuando prácticamente todos sueñan (o soñamos) con estas metas, alcanzarlas, está en relación directa con nuestros ingresos y según los datos recogidos en el censo del 2000 existe una gran mayoría de habitantes por debajo de lo que llaman “nivel de pobreza” y créanme, aún cuando sabemos que están en pos del sueño, tienen que hacerlo enfrentando a diario la pesadilla de una vida cada vez más cara en todos los aspectos y los que aún no han llegado siquiera al primer peldaño del sueño, -el auto-o simplemente son personas que no pueden manejar, no les queda más remedio que fajarse con los inexistentes buses, con largas esperas a pleno sol y el resto de las angustias que nos causan.

Daniel Shoer Roth en una de sus maravillosas columnas nos delitó con su “Crónica del bus ausente”. En ella nos relata magistralmente en una especie de “reality show” las vivencias de numerosos usuarios entrevistados en las mismas paradas; su conclusión: “ciudadanos lloran por un sistema de autobuses que los lleve a algún lugar”.

El sur de la Florida recibió en ayuda federal la friolera de 286 mil millones para proyectos locales en donde están incluidos líneas nuevas del Metrorail, mejoras en las carreteras existentes y servicio de transporte e inclusive el proyectado tranvía del downtown.

Los autobuses, aparentemente siguen siendo la cenicienta en todos estos proyectos, se mencionan pero, muy tímidamente! Talmente parece que los intereses petroleros no quieren que nos bajemos de nuestros autos, no quieren perder a una clientela tan segura.

Jamás el condado había contado con respaldo financiero federal de tal envergadura, más las asignaciones estatales y el famoso “medio centavo de Penelas”.

Asi que sólo falta que los encargados de usarlo lo hagan con la diligencia y disciplina fiscal necesarias y en cuanto a los buses, quisiera terminar como lo hizo Daniel Shoer Roth en su columna: “A los autobuses les falta lanzar una nueva ruta P del Progreso.

Jorge Gastón
Miami, Fl.