LAS NUEVAS MEDIDAS DE EEUU HACIA CUBA
Por Fernando J. Milanés
La noticia que sorprendió a pocos de la apertura del gobierno de EEUU hacia Cuba, en cuanto a remesas y viajes, va a producir reacciones disimiles en el exilio. El exilio histórico, al que pertenezco, verá esta nueva política como un golpe más a nuestra ambición de que Cuba se convierta en una democracia similar a la Cuba libre y progresista que recordamos.
Una ayuda por muy directa que sea al sufrido pueblo actual, solo ayudará a los Castro y disminuirá una potencial explosión popular que hubiera podido llevar a una intervención militar interna y a un cambio de régimen. La falsa apertura económica, cacareada por Raúl, ha sido acompañada de un aumento a la represión interna, y un añadido estimulo económico americano, solo llevara a continuar la esclavitud de la ciudadanía.
Los que examinamos la realidad del momento y tratamos de no dejarnos influenciar por nuestros recuerdos y emociones, comprendemos que la mayoría de la población en Cuba y una cada vez mayor parte del exilio, está compuesta por personas nacidas durante el castrato. Es también una realidad, que el régimen tiránico ha sido por muchos años mantenido, indirectamente, en el poder por la ayuda de las remesas y viajes de los familiares de los cubanos que se han marchado del país.
Reacción natural es evitar el hambre y miseria de nuestros familiares y poder tener el placer de abrazarlos. A su vez, evitar las penurias diarias tiene prioridad sobre los derechos civiles, sobretodo en una población que no conoce alternativas. No sorprende, por ende, que esta ayuda adicional contribuya a apagar el fuego de la disconformidad. Existe solo una esperanza, la existencia de un nuevo grupo de “mambises”.
Esta minoría, está dispuesta al sacrificio de sus vidas y solo aceptaría una completa libertad de nuestro pueblo, no dejándose llevar por falsas y pequeñas mejoras económicas. Allá tenemos como ejemplo al Dr. Oscar Elías Biscet que con otros de su misma estirpe, pretende seguir luchando y no se deja engañar por ilusorias aperturas o equivocadas políticas extranjeras.
Todos los cubanos acá, los históricos, del Mariel, balseros, ex-presos políticos, nuevos inmigrantes, aprobemos o no estas nuevas medidas, tenemos que reflexionar, y si es cierto que ponemos la libertad de Cuba por arriba de nuestros sentimientos individuales, es nuestro deber el apoyar a la resistencia interna.
Miami, FL., USA
01/16/2011
Es cierto que las remesas y viajes a Cuba han beneficiado a estos tiranos indirectamente, ¿pero quién de nosotros pudiera volver las espaldas a la necesidad de familiares allá? ¿Si nosotros hacemos donaciones a organizaciones caritativas, a extraños para su bienestar, como no lo vamos hacer para los nuestros? La prioridad del pueblo cubano es sobrevivir, y nosotros que estamos aquí en el exilio no vamos a dejar de ayudarlos. No pienso que el pueblo cubano sea tan ignorante como para no saber que su situación grave es producto del régimen castrista.
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