EL LEGADO DE UN PRESIDENTE
Por Fernando J. Milanés MD
Una noticia en primera plana de El Nuevo Herald menciona como el derrame de petróleo del golfo pudiera afectar el legado de Obama. Al igual que el posible reciente éxito conteniendo el derrame de petróleo no es debido a “Obama y su equipo”, no se debe hacer responsable al presidente por este suceso lamentable. Un presidente se juzga a veces muchos años después del término de su mandato.
En el caso actual, no debe ser difícil establecer un juicio, ya que él ha tenido el coraje, gústenos o no, de cambiar radicalmente al gobierno del país. Desde la época de Woodrow Wilson y F.D.R., no ha existido un ejecutivo que haya atentado un cambio tan radical hacia el progresismo.
Las leyes de estímulo económico, de los cuidados de la salud, reforma financiera, la propuesta reforma energética, y otros dictamines, nos llevarán inexorablemente a un renunciamiento de nuestras voluntades y responsabilidades individuales, con sus inevitables éxitos y fracasos, y a un mayor control gubernamental sobre nuestras vidas.
En nuestras relaciones externas existe un franco cambio del “exclusivismo” americano e ideología neoconservadora de implantar, a la fuerza si se requiriera, democracias en otros países, a un aislamiento, con cooperación y subyugación a deseos de otras potencias, aumentando nuestra popularidad mundial, quizás al precio de mayores riesgos.
En mi opinión estas decisiones nos llevaran a un futuro de dificultades económicas, aunque con algunas ventajas laborales y a una deuda insostenible. Muchos pensarán distinto, pero lo único cierto es que en el presente especulamos y que el futuro, si mejor o peor, nos afectará a todos. Por lo tanto, deberíamos desear, aunque no lo pensemos, que el legado de Obama sea positivo.
Miami, FL., USA
07/14/2010
Estoy muy de acuerdo con el escrito del Dr. Milanés.
ResponderEliminarSe puede estar de acuerdo o no con la política del presidente Obama, pero una cosa cierta es que esta política nos va a afectar a todos por igual, en mayor o menor escala.
EEUU es una nación poderosa, basada en el trabajo árduo de su gente y en el respeto a las leyes, y por eso tengo fe en que se pueda salir de este atolladero en que nos encontramos y al que tantas cosas malas se han confabulado para agrandarlo, como el problema de la inmigración ilegal, el derrame de petróleo y la crisis económica que heredamos.
Yo no quisiera estar en el lugar del presidente Obama en estos momentos.
Felicito al Dr. Milanés por su escrito y su manera de exponer el panorama negro que se nos viene encima, sin amargas críticas, solamente haciendo un conteo verídico de las cosas.
Martha Pardiño
Opino que el éxito de un presidente está controlado por los sucesos externos que afectan directamente su nación. Indiscutiblemente, el presidente Obama a tratado fuertemente de sacar nuestra nación de la crisis económica y establecer nuevas leyes que beneficien a todos los ciudadanos, desde los ilegales hasta los ancianos y personas sin seguro medico. No es menos cierto que el derrame de petróleo en el golfo, lo cual no es culpa del presidente Obama, la emigración ilegal y otro sin numero de fenómenos que nos conciernen directamente, son los que están afectando la economía estadounidense y por ende el mandato del presidente Obama. Las encuestas reflejan que los estadounidense opinan que Obama en vez de tener éxito en su tan vociferado “Cambio”, está llevando la nación en un rumbo equivocado, asía una nueva crisis.
ResponderEliminarPorque razón el pueblo norteamericano fue tan riguroso con el presidente Bush Jr. con respecto a la crisis económica de este país, cuando El simplemente se encontraba presidiendo esta nación cuando ocurrieron los atentados terroristas del 911, los cuales si realmente forzaron a nuestra nación a una crisis económica y él tampoco tuvo culpa de que ocurrieran. Indiscutiblemente, los fenómenos externos y sucesos terroristas que afectan nuestra nación son los que rigen la popularidad y simpaiatia de un presidente, sin darle la oportunidad de demostrar que realmente tiene las agallas de gobernar nuestra nación. Así que, tratemos de no ser tan severos con los que nos gobiernan y tratemos un poco mas de mejorar nuestra condición económica actual para que de esta forma solo resalte ante los ojos del mundo, los Estados Unidos de Norteamérica, y no un ser humano, como lo es el presidente! Apoyemos nuestro presidente, no guste o no, pues a esta altura nada podemos hacer hasta que termine su mandato, pues a la larga o la corta, todos representamos los Estados Unidos de Norteamérica y no solo un individuado.