¡HASTA CUANDO CON ORESTES MIÑOSO!
José (Pepe) Martel
Orestes “Minnie” Miñoso tiene una majestuosa estatua frente al estadio de los Medias Blancas de Chicago y además para todos los cubanos amantes del béisbol es tremendo matancero y de pura cepa y nadie lo propone para militar dentro del Salón de la Fama de Cooperstown en Nueva York. Damas y caballeros, fanática de la pelota de grandes ligas comencemos un campaña multinacional para abrirles los ojos, destupirles los oídos y comprarles buenas gafas a esos expertos seleccionadores de luminarias entrando en el hogar-nicho de las grandes estrellas que es Cooperstown. Recuerdo en una ocasión que hablé con Miñoso sobre esta injusta tardanza de su entrada triunfal en ese sitio de las celebridades me respondió: “Yo quiero ver mi entrada en vida, más fallecido no me interesa”. Puede apreciar y comprender su respuesta ya que su rostro mostró pesar y al mismo tiempo. El caso Miñoso es digno de resolver.
Sobrados méritos posee Miñoso para ser exaltado al “Hall of Fame” le sobre y tiene para compartir con cualquiera que necesite prestigio, méritos, talento, esfuerzo, dedicación y además muchos numeritos también. Si le echamos un vistazo a sus estadísticas no quedamos perplejo por esa injusticia de tenerlo apartado y casi olvidado a “The Cuban Rocket” con le dicen los fanáticos en Chicago y nosotros “El Cohete Cubano”.
Si hacemos un análisis comparativo mostrando algunos de los numeritos de estos cuatro atletas sepias que son honorables miembros de fama en Cooperstown: Jackie Robinson, Larry Doby, Roy Campanella y Monte Irvin nuestra proposición tiene respaldo absoluto si comparamos sus respetivos promedios y consabidos numeritos de nuestro compatriota Orestes Miñoso:
-Primer lugar en sencillos (hits): Orestes Miñoso 1,963; Jackie Robinson 1,518; Larry Doby 1,515; Roy Campanella 1,161 y Monte Irvin 731.
-Primer lugar en dobles: Miñoso 336; Robinson 273; Doby 243, Campanella 178 e Irvin 97.
-Primer lugar en triples: Miñoso 83, Robinson 54; Doby 52; Campanella 18 e Irvin 17.
-Primer lugar en carreras anotadas: Miñoso 1,136; Robinson 947; Doby 960; Campanella 627 e Irvin 366.
-Primer lugar en impulsadas al plato: Miñoso 1,023; Robinson 734; Doby 670; Campanella 627 e Irvin 366.
-Primer lugar en envasados: Miñoso 3,023; Robinson 2,310; Doby 2,621; Campanella 2,101 e Irvin 1,187.
Primer lugar en bases robadas: Miñoso 205; Robinson 197; Doby 47; Irvin 28 y Campanella 25.
Segundo lugar en bases recibidas: Doby 1,011; Miñoso 584; Campanella 501; Robinson 291 e Irvin 220.
Segundo lugar en promedio de bateo por vida: Robinson .311; Miñoso .298; Irvin .293; Doby .283 y Campanella .276.
Tercer lugar en cuadrangulares: Doby 253; Campanella 242; Miñoso 186; Robinson 137 e Irvin 99.
Las últimas temporadas jugadas por Miñoso incidieron de forma negativa en su promedio de bateo acumulado. En 1962 solo alcanzó .196 en 39 juegos con el Chicago. En 1963 en 109 juegos bateó para .229 con los Senadores de Washington. En 1964 reapareció con Chicago y en 30 apariciones bateó .226 y para rematar en 1976 en 3 presentaciones solo promedió .125 y su última aparición en 1980 resultó inconcebible pero si estableció un record de 5 décadas de presencia física dentro del béisbol de las Grandes Ligas y fue su despedida con las Medias Blancas de Chicago.
Debutó en 1949 con los Indios del Cleveland participando en 9 desafíos y promedio de bateo de .188, siendo el primer pelotero latino negro en romper la carrera racial ya que Robinson y Doby lo antecedieron. Ya en 1951 jugando con Chicago bateó .326; en 1952 (.281); 1953 (.313); 1954 (.320); 1955 (.288); 1956 (.316); 1957 (.310); 1958 (.302); 1959 (.302); 1960 .311) y 1961 (.280).
Sus numeritos finales hablan solos: En 1835 juegos; 6,579 veces al bate; 1,963 imparables; 336 dobles; 83 triples; 186 cuadrangulares; 1,136 anotadas; 1,023 impulsadas, 814 bases por bolas; 584 ponches ingeridos y un promedio de bateo por vida de .298 en cinco décadas de presencia física. Que jugador en las grandes ligas tuvo ese presencia solo el “Minnie” de Chicago.
Merece y bien ganada la “Leyenda de Chicago” como muchos también le dicen a diario. Cuya estatua colocada en los umbrales del estadio “Celular Park” reclama el transito triunfante de Orestes al Salón de la Fama de Cooperstown en Nueva York. Qué ha sucedido con esa tardanza de darle a Miñoso lo que es justo de Miñoso, el ganado reconocimiento a su vida como un inolvidable pelotero de altura que siempre fue o es que una estatua erigida a su nombre y figura es una burla.
Estuve presente cuando en una ocasión se celebraba una conferencia de prensa en el restaurante Versailles auspiciada por el Salón de la Fama del Deporte Cubano de Miami y donde quedó inaugurada una cruzada nacional para apadrinar el reconocimiento de todos a este baluarte del béisbol organizado. Miñoso emocionado dijo: “Es ahora en vida que deseo entrar en Cooperstown cuando deje este mundo no me interesa”. Esas sentidas frases conmovieron a todos los presentes y es una realidad cuando muerta ¿Para qué? Recuerdo que mi abuelo paterno decía “todo lo que me quieran dar dénmelo en vida y a mi tumba ni flores me pongan”.
Miami, Florida, USA.
joselmartel@yahoo.com
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