martes, 1 de febrero de 2011

LA GENTE PROTESTA EN LAS CALLES DE EGIPTO


MASIVAS PROTESTAS EN EGIPTO PRESAGIAN CAIDA DE MUBARAK
Por Alberto Muller

Algunos ya predicen que el fin de Mubarak es inminente, mientras los manifestantes en El Cairo y Alejandría toman las calles en una muestra de que el poder soberano del pueblo, cuando se activa, puede derrotar al más poderoso de los dictadores.

En una movida táctica de última hora, el presidente Mubarak nombró a dos altos jefes militares para las vicepresidencias del país, que obviamente no resultaron suficientes para aplacar los ánimos de los manifestantes.

El toque de queda del Ministerio de Defensa egipcio no es respetado ni en El Cairo ni en Alejandría, y las plazas públicas siguen tomadas por el pueblo airado, que pide la retirada de Mubarak.

Hasta ahora la dinámica popular en Egipto, en medio de sus manifestaciones multitudinarias contra el régimen de Mubarak, tienen un parecido asombroso con la revuelta en Túnez que provocaron la caída del dictador Ben Alí.

La revuelta popular egipcia ya tiene un saldo de decenas de muertos y miles de heridos. Uno de los principales aliados de Mubarak, el empresario Ahmed Ess, ha renunciado al secretariado del Partido Nacional Democrático del presidente egipcio.

También el popular predicador árabeYusuf al Qardaui, ha pedido a Mubarak que se retire y renuncie, antes de que la fuerza popular lo expulse del poder.

Y la poderosa organización de los ‘Hermanos Musulmanes’ en Egipto, se encuentra como uno de los grandes catalizadores de las masivas manifestaciones en las calles.

Para Estados Unidos y el presidente Obama, la crisis en Egipto puede tener dimensiones desastrosas, si al final de la misma la violencia impone sus reglas y el radicalismo logra derrumbar al régimen de Mubarak.

Pero otros países autoritarios del mundo árabe y de otros rincones del planeta en América Latina y el Caribe, como Yemen, Arabia Saudita, Irán, Argelia, Cuba y Venezuela, observan con cautela el acontecer egipcio, pues los pueblos cuando activan sus derechos a participar, son indetenibles.

Otro factor a considerar en la crisis del mundo árabe, aunque realmente no parece estar presente en la motivación de las manifestaciones en Egipto, es que la mayoría de los regímenes árabes –como el de Mubarak en Egipto- pertenecen a la secta de los sunitas.

Y eso explica la alegría del presidente iraní, Mahmud Ahmedineyad, estrechamente vinculado a los chiítas, ante las revueltas en El Cairo y Alejandría.

Miami, FL., USA
02/01/2011

1 comentario:

  1. Mubarak es un dictador, pero necesitamos tener cuidado con la alternativa – musulmanes radicales. Si estos radicales se apoderan de egipcio, los ciudadanos egipcio clamaran el retorno de Mubarak y nosotros también estaremos perdidos sin este cuasi aliado como un estado tapón en esa región. Dios nos salve a todos si este polvorín se llega a explotar.

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