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viernes, 2 de julio de 2010
PAOLO ROSSI, ESPAÑA 1982
LA BARBARIE HECHA DEPORTE O EL IMPERIO DE LA SUCIEDAD: EL FUTBOL MUNDIAL
Por Andrés Pascual
Presente en cada terreno de las llamadas súperligas europeas, el fantasma del racismo recorre el Viejo Continente de una punta a la otra como elemento que sí une de verdad a la “hinchada” del balompié…
Cada año se incrementan las agresiones verbales; o a través de pancartas desplegadas en los estadios contra jugadores de raza negra. Y eso que fue en la vetusta Europa donde hace mas de 200 años, en Francia para ser exactos, se levantaron los ciudadanos blandiendo como espada la Declaración de Derechos del Individuo que, por lo menos el capítulo más importante, Igualdad, se niega diariamente en cada partido de liga de la mayoría de sus países.
El último gran escándalo colectivo del balompié ocurrió en Italia, cuando una investigación por dopaje explotó como una bomba sucia de arreglos de juego a favor del club Juventud, uno de los mas populares de la Liga del Calcio; sin embargo, en ese escándalo también se involucraron Lazio, Milán y Florentina.
Complicados en la actividad ilícita el Director General del Juventud, su administrador y delegado, los propietarios del Florentina, el presidente del Lazio, designadores de árbitros, responsables de jueces de línea federal, comisario de árbitros, vicepresidente y secretario de la federación de fútbol, , un dirigente del Milán, nueve árbitros principales y 3 periodistas… ¡Huf! Un verdadero vertedero de heces…pero lo interesante fue que el público no se ofendió por tal situación.
Ante situaciones que involucren a Italia y a países con idiomas derivados del latín, siempre emerge la suposición de “remanente del Imperio Romano”, con barniz filosófico popular basado en “todo lo que nació en Roma, hasta hoy, es mas susceptible a corromperse que en el resto del mundo de acuerdo a la herencia histórica…” En el capítulo europeo, vanguardia del fútbol mundial, el fanático queda a merced e indefenso ante los manejos de la mafia, que la es de verdad, y que no solo es italiana.
Masserattis de 100000 dólares, relojes Patek de más de 40000, y mucho más que generosas propinas fueron las modestas prebendas como regalos que les entregaron a los involucrados en el caso.
Detalles sucios que ni esconde la crápula del balompié mundial, como en 1978, cuando al Peru le pagaron para que se confabulara contra Brasil a favor de Argentina.
O como en el 2006, cuando el kaiser Beckenbauer dijera dos días antes de comenzar el evento, con total desconocimiento de dos de los tres favoritos, Argentina y Brasil, que “presiento que la final tendrá sabor europeo por ambos lados”, demasiado sospechoso por parte de quien fue el Presidente Organizativo del evento. Y ni sugiero que esa Copa se haya arreglado; pero…
En 1978 Paolo Rossi era un joven talentoso y prometedor. En 1980 anoto dos goles por el Perugia contra Avellino en un empate 2-2; sin embargo, detrás de los goles de Rossi, estaba el compromiso a que había llegado con raqueteros de arreglar el partido. El delantero fue suspendido por 3 años que después le redujeron a dos.
El 29 de abril de 1982, menos de cinco semanas antes del inicio de la Copa Mundial, fue reclamado por la selección “azzurri” del técnico Enzo Bearzot quien declaro que “si Rossi no estaba en España, Italia no tendría oportunidad de triunfar” y lo cierto es que la primera etapa del campeonato paso sin penas ni glorias para “el pecador” escogido. Después y durante la final, Italia gano y Rossi tuvo un peso definido en esto; pero, en 1986, el jugador se mostro sin ningún brillo digno de una leyenda que trascendió mas por una medida errática y conflictiva de su federación nacional y del entrenador de aquella selección.
Sin dudas que el balompié es el padre de la corrupción deportiva, capaz de generar vergüenza en rostros honestos; pero de mayor significación, es el único deporte cuyo tiempo de juego, en vez de extender lazos amistosos entre los países que confrontan atléticamente, crea condiciones de barbarie que, año tras año, incrementan el numero de muertos y destrozos a través de una enemistad de inmediato cumplimiento, hasta hoy, digna de sicólogos para su comprensión.
Miami, FL., USA
07/02/2010
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