EL PROBLEMA NO ES EL HEAT; ES EL COACH
Autor: Juan Carlos León
El Miami-Heat sigue perdiendo terreno en sus aspiraciones de ganar el título de la NBA. Al parecer el quinteto de la Capital del Sol no puede derrotar a los equipos grandes y tampoco ha podido sellar posibles victorias. Esto ha provocado un gran descontento entre la fanaticada del sur de la Florida y la cabeza que la gente está pidiendo es la del coach Erik Spoelstra.
El agente libre y mejor basquetbolista del mundo, LeBron James, decidió traer sus talentos a South Beach esta campaña contra todo pronóstico y de esta manera unirse a Dwyane Wade y Chris Bosh para formar la mejor tripleta de ases del mundo. Estos tres superestrellas ganarán cerca de 350 millones de dólares en los próximos seis años pero, aún así, el Heat no acaba de encontrar su paso y continúa jugando muy errática e inconsistentemente.
Como si fuera poco, el dueño del Heat Micky Arison, contrató los servicios del francotirador desde la línea de los tres puntos Mike Miller y al experimentado armador Mike Bibby, quien ya lleva 9 años en la liga y 80 juegos de play-offs en su historial. Pero nada de esto ha sido suficiente y el equipo parece desmoronarse a menos de 20 juegos para que concluya la temporada regular.
El nombre de Pat Riley está en boca de todos por estos días. El ha sido uno de los entrenadores más exitosos en la historia de la NBA. No se asombren si lo ven tomar la batuta en la mano y hacer lo que hasta ahora Spoelstra no ha sido capaz de hacer: ganar convincentemente y rematar los juegos donde el equipo ha estado delante en el marcador durante casi todo el partido. Lo mismo pasó con Stan Van Gundy en el 2005-2006 y el resultado final no pudo ser mejor: nuestro único anillo en la historia de la franquicia.
Todavía estamos a tiempo de hacer una movida estratégica que puede ser crucial para el futuro del Heat de Miami. No nos rompamos más la cabeza tratando de averiguar dónde está la clave del problema. Los jugadores tienen calidad de sobra pero quizás al coach Spoelstra le falta mucho por aprender en el más dinámico de los deportes. Sin duda alguna la presencia de Riley en el banco de nuestro plantel será una inspiración determinante para alzarnos con el tan codiciado anillo de campeón.
Miami, FL., USA
03/08/2011
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