LOS MAFIOSOS EN CUBA DESDE 1934

LA MAFIA ITALIANA INVADIO CUBA DESDE 1934
Por José (Pepe) Martel

Los sucesos de 1989 que dieron lugar a las cacareadas causas No 1 y 2 en Cuba tuvieron dos propósitos primordiales por ese régimen. El primero buscar culpables y castigarlos ante la opinión pública mundial por las denuncias del gobierno norteamericano por el gran negocio de la droga representado por los hermanos Castro y Compañía a través del Cartel de La Habana y sofocar un movimiento militar que fraguaban los generales Arnaldo Ochoa y José Abrantes ambos de acuerdo en propinar un golpe de estado militar y juzgar a Fidel y Raúl Castro. Dos razones poderosas que dieron lugar a esas dos causas conocidas. Pero el problema de la droga en Cuba es un tema viejo y data desde 1934.

El imperio del narcotráfico en Cuba según fuente de datos de Wikipedia, la enciclopedia libre, la palabra MAFIA término utilizado a nivel mundial para referirse a una clase o categoría del crimen organizado y es descrita como una desambiguación cuyo significado proviene de la palabra desambiguar que a su vez significa hacer desaparecer la ambigüedad o el carácter dudoso o incierto de una cosa.

La mafia nació en Sicilia, Italia con el nombre de Cosa Nostra llena de personalidades corruptas que empleando “códigos de honor” controlaban y mantenían el narcotráfico local hasta lograr su expansión territorial escogiendo América y el país Estados Unidos comenzando en Nueva York.

En Cuba un gran pionero de la droga resultó Lucky Luciano para el tráfico de heroína a Estados Unidos. El judío Meyer Lansky fue el fundador del imperio del crimen desde La Habana apoyado en sus estrechas relaciones con el general Fulgencio Batista desde 1934. La Habana fue un lugar escogido para el lavado de dinero ilegal de los Estados Unidos. Contrabandos de diamantes, oro y la droga fomentaron un negocio lucrativo donde el dinero corría en redes de casinos, famosos hoteles, cabarets, clubs y restaurantes de la capital y otras capitales de provincias.

Conectando al jugoso negocio de la cocaína destinada a corromper el consumo de la sociedad americana. Destacados mafiosos enviaban a muchos turistas a visitar La Habana con todos sus gastos pagados: Transportación, hoteles, comidas y bebidas por días programados para despertar el interés del goce y satisfacción de disfrutar de las comodidades y del esplendor de se mostraba en Cuba.

En diciembre de 1946 se celebró en Hotel Nacional habanero un acontecimiento fastuoso donde grandes mafiosos de la época se reunieron. Se llamó “Capo di Tutti di Capi” organizado por Lucky Luciano asistiendo los más famosos y poderosos mafiosos de esos tiempos: Albert Anastasia, Joseph Bonanno (le decían Joe Bananas), Joe Profacii, Guiseppe Magliocco, Mike Miranda, Augie Pisano, Salvatore “Toto” Riina, Antonio “Tony” Biffa, Bernardo Provenzo, Fabrizzio “Fab” Molinan, Benito “Pad” Lorenzetti, Laureano Spollanzoné (conocido como el Tesorero), Antonio Giuffre y otros de sus representantes siendo una mayoría presentes de Nueva York y Nueva Jersey.

Antes de la culminación del evento se incorporaron Steve Magaddino (Buffalo, NY), Tony Accardi (Chicago, IL) y los hermanos Charlie y Ronconi Fischetti, herederos del grupo de Al Capone. Este último enfermo en su residencia de Miami. De Cuba asistieron Amadeo Barletta y Amleto Battiste y casi terminando la llegada de Carlos Marcello (New Orleans) y de la Florida, el “Dandy Phil” Kastel y otro famoso, Santo Traficante, que utilizaba nombres como: Doc Harris o Baldy Stacher, era el segundo hombre de Lansky. No podía faltar otro gánster reconocido en la presencia de Frank Sinatra encargado del cierre de esta gran reunión. La prensa cubana destacó este acontecimiento de forma amplia como hombres de negocios en Cuba.

Al triunfo de la revolución Castro los botó a todos, cerró los casinos y sala de juegos. Evitó que La Habana se convirtiera en lo que hoy es Las Vegas, Nevadas y total ¿para qué? Esclavizar a un pueblo, quitar libertades e imponer el comunismo de hambre y miseria para después fomentar y autorizar la prostitución con la apertura de casinos de juego para solo turistas y prostituir hasta adolescentes y niñas con la sexualidad infantil.

La cosa comenzó desde 1934 donde esos mafiosos quería hacer a Cuba una potencia económica sin precedente en la historia del país y al llegar el maldito que mandó a parar resultó la desgracia y el subdesarrollo de la Cuba actual con sangre y luto (rojo y negro) como la bandera del M-26-7. ¡Que desgracia y desilusión! Y que traición.

Miami, Florida, USA.
joselmartel@yahoo.com