NELSON MANDELA, PREMIO NOBEL DE LA PAZ EN 1993

¿QUE QUEDA DEL EJEMPLO MANDELA EN SURAFRICA?
Por Andrés Pascual

¿Cuál es el ejemplo a seguir de la juventud surafricana, el de principios morales y lucha por la igualdad de Nelson Mandela? ¿A quien le interesan los anos cumplidos en prisión por el líder fundador del CNA en su país? Mandela se convirtió en ingrediente de una paella a la que no están invitados los negros explotados o neo esclavizados, porque el banquete es en Europa, en Estados Unidos…es decir, Mandela ya es un negocio redondo fuera de su país que no influye en nada ni en Soweto ni, mucho menos, en ninguna otra nación del continente negro.

Recientemente Oprah Winfrey enfrento un escándalo con una directora de “su escuela” en Suráfrica…los negros surafricanos saben quien es Oprah, conocen de los millones de la presentadora y de la influencia que ha logrado entre la población multirracial del país al que pretenden presentar, todavía, a pesar de ella y de Obama, como el “sumus” del racismo.

Al joven negro surafricano no le puede venir nadie con manuales trasnochados sobre lucha de clases ni formas de combatir al racismo; ellos saben que son inefectivos porque los escribieron gente detrás de un buro hace muchos anos y el tiempo paso y el mundo de hoy, por lo menos allá, se llama “sálvese el que pueda” que, en blanco y negro, significa “el que mas poder tenga”, poder financiero y poder de relaciones políticas.

¿Alguien ha pensado por que la Winfrey tiene su escuela en Suráfrica y no en el cuerno africano? Porque el África de hoy no es Suráfrica, es Somalia, los países de crecimiento del desierto, de la hambruna absoluta, de las guerras sectaritas y tribales, del éxodo, de cientos de miles de muertos como resultado de todo lo anterior. La situación del negro de hoy allá es mas difícil porque ya no se le puede echar la culpa al blanco; en el caso de los diamantes, se lo venden los negros a los blancos después que emplearon a otros negros como esclavos y terminaron matándolos, arrasando con aldeas completas, organizados en bandas criminales bien conectadas con sus gobiernos y quien sabe con que otros poderes fantasmas ni de donde. Tal vez esa sangre y esa miseria del África verdadero le ocasione vómitos a la presentadora y a todo el sector de la Media y del gremio americano. Entonces mejor Soweto, donde, además, están las raíces del negro que se hace llamar afroamericano.

El primer paso de lo que se haría con el poder lo dio Winnie, la esposa de Nelson, estando el líder en la cárcel: para uso personal y en estrafalario y desenfrenado abuso de poder, utilizo a miles de jóvenes del CNA, con muchos tendría relaciones sexuales de los que ordeno asesinar a nadie sabe cuantos todavía.

Según Lali Cambra, fechado en Ciudad del Cabo el 24 de marzo pasado y publicado en El País español con el titulo La “dolce vita” de los herederos de Mandela, “los jóvenes políticos de Suráfrica sustituyen los ideales de la lucha “antiapartheid” por el lujo, las fiestas y las carreras…” y, continua, “los Mini Coopers son los autos preferidos por los jóvenes negros con posibilidades en los ghettos surafricanos de hoy…” Trágicamente, un rapero de allá embistió a exceso de velocidad a un grupo de estudiantes que cruzaban una calle muy transitada de Soweto con saldo de 4 muertos y varios heridos, el artista y su socio arrojaron altos índices de droga y alcohol y, a pesar de las protestas, fue visitado en la cárcel por el joven líder del Consejo de hoy, Julius Malema, de 28 anos y enriquecido sin estudios; pero bien conectado políticamente que logro que le pusieran en libertad.

Malema es un gran adicto a la cultura del “bling” u ostentación entre los negros, creada aquí por los afroamericanos que la utilizan para lucir hipócritamente en los empobrecidos getthos negros de Detroit, Nueva York o Los Ángeles joyas a veces valoradas en mas de 100000 dólares; pero también Siphiwe Nyanda, Ministro de Comunicaciones, aunque dispone de vivienda oficial en un lujoso barrio de Ciudad del Cabo, prefiere los hoteles mas caros cuando visita la ciudad…

Lo peor de todo, Ndoda Ngemntu, portavoz de la liga joven del CNA en el Cabo Occidental, escribe Cambra, justifica a su líder con “El Congreso lucho por el estilo de vida de Malema”.

Todo esto ocurre en Suráfrica, el mas industrializado de los países del continente que logro deponer el control absoluto del blanco a través de su propia revolución, pero con una mucho mas que efectiva ayuda del exterior y del que se dice que ahora es cuando mandan de verdad los descendientes de europeos que todavía ganan 6 veces mas que los negros; en el que construir 2 millones de casas seria poco para sustituir “las chabolas”; un país en el que el desempleo de la población negra alcanza el 28 % y donde el 48 % vive con menos de 32 euros mensuales…

Según el escritor y periodista William Gumede, “el gusto por la ostentación ya es cultura; significa éxito y solo se necesita un amante rico, la relación con un político influyente o los lazos con un j’ mafioso…”

La vida ensena que al que no tiene nada y lo necesita todo no se le puede dar poder de acceso al dinero ni a cuidar una fortuna porque se la roban y, lo otro, este elemento desprovisto en sus inicios hasta de los dientes con que masticar, es el que mas promete, hasta que llega al poder…

La “nueva ola” del CNA entiende que ese problema de sacrificio, imposiciones, abstenciones y miserias no es con ellos; son buenos temas para Hollywood con Morgan Freeman y compañía, por un lado; por el otro, como recordatorio de fechas del proceso de aquella lucha en los programas como el de Oprah Winfrey o The View…

Y algo muy especial: el asunto era quitar al blanco como protagonista del poder y cara fea del racismo…lo de hoy, con el mundo acabándose allá adentro entre los propios negros, eso no es noticia…de que no salga en titulares preocupantes que pudieran ocasionar problemas se ocupan los “liberales” de aquí y los de Europa que, a fin de cuentas, son los que verdaderamente están disfrutando ese pastel al que ya no tienen acceso ni los comunistas que tanto hicieron por Mandela y su revolución, tal vez por eso nadie conozca del peligroso asesinato del primer supremacista blanco del país hace menos de un ano.

A los nuevos zares del CNA no les interesan ya ni Castro ni el legado Che Guevara y, posiblemente, cuando esta en sus bacanales con blancos occidentales, al viejo líder Nelson Mandela tampoco.

Miami, FL., USA
06/13/2010