sábado, 25 de septiembre de 2010

EL DR. OSCAR ELIAS BISCET, CREADOR DE LA FUNDACION LAWTON DE DERECHOS HUMANOS


EL PRISIONERO OLVIDADO
Por Fernando J. Milanés MD

Recuerdo cuando en la década de los ’90, un valiente compañero nos enseñó unas grabaciones, que sustrajo clandestinamente, de un médico nacido en Cuba en el año 1961 durante la tiranía, en las que se denunciaban los asesinatos de niños recién nacidos en hospitales del País. No fue fácil llevar a la luz pública esa denuncia, aunque con tesón se logró darla a conocer a nivel internacional. Este médico se ha convertido en uno de los ejemplos más bellos de la resistencia pacífica en favor de los derechos humanos en nuestro País natal. Sus esfuerzos lo han llevado a cárcel, vejaciones, torturas y abusos hacia su familia que, al igual que él, mantienen la lucha.

Con muchos años de desilusión, y al extremo de querer olvidar mi pasado, vislumbro una estrella en el horizonte y recuerdo la historia de nuestros mambises y sus largas luchas en aras de la libertad. Antonio Maceo, renunciando las ofertas de paz de Martínez Campo, no firmó las condiciones impuestas en Zanjón, y siguió peleando casi sin tropas, sin alimentos, ni armas, solamente porque solo le era aceptable una completa independencia para Cuba. Sus amigos, para salvarle la vida y conservarlo con miras a una futura pelea, lo envían a Jamaica a recibir dinero y pertrechos, encontrando solo un exilio rico que no le prestó ayuda. Con el sacrificio de su vida y su inspiración, estos patriotas de nuestro pasado lograron sus sueños de libertad.

Nuestro prisionero olvidado, al que por algo llaman el nuevo Maceo, ha recibido galardones a escala mundial por su lucha cívica a favor de los derechos humanos. Siguiendo el ejemplo de Gandhi, Martin Luther King Jr., y el Dalai Lama, cuyas filosofías admira, su lucha ha sido siempre pacífica. Al igual que Maceo, a pesar de los muchos sufrimientos psíquicos y corporales, merecedor como pocos de su libertad incondicional, sigue expresando que no se retiraría de Cuba, aunque estuviera fuera de la cárcel, hasta verla totalmente libre.

En estos momentos en que se discuten las incomodidades de algunos de los que lograron emigrar, y las posibilidades de una apertura para otros presos, con la falsa idea de que representaría un cambio político, no podemos desatender a un verdadero ejemplo de patriotismo. El Dr. Oscar Elías Biscet no escogió caminos abiertos para él, como el de vivir de su profesión, y en unión de su familia gozar de los pequeños privilegios que con ésta hubiera obtenido, ni de emigrar con fines de lucro a otros horizontes.

Eligió luchar por sus ideales y a pesar de los padecimientos que la tiranía le ha impuesto, mantiene la entereza moral y cívica que pocos seres sostienen. Su ejemplo nos da la esperanza, aunque quizá sea solo para nuestros hijos y nietos, de que en un futuro exista una Cuba Libre y Soberana. Es nuestro deber ayudar a prisioneros como el Dr. Oscar Elías Biscet creador de la Fundación Lawton de Derechos Humanos, organización que lo representa en el extranjero.

Miami, FL., USA
09/25/2010

1 comentario:

  1. El Dr. Biscet, igual que todos los disidentes, muertos y vivos, si son verdaderos heroes de nuestros tiempos.

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