ESE DINERO NO ES DE TRIPLE-A
Por Andrés Pascual
Apreciaciones fanáticas al margen, todas equivocadas con respecto a Aroldis Chapman, todavía no he leído ni una sola opinión de “improsultos del pasatiempo”, de gente de prensa o de público, capaz de ser prudentemente realista con respecto al rumor de que el Cinci pudiera llamar al prometedor zurdo cubano al bullpen del club en una maniobra que sugiere un nervioso apuro de oficina.
Un aficionado cubano: “…esa gente no sabe de béisbol, como van a llamar tan rápido y para el bullpen a un hombre joven que tiene tanto descontrol…”, tomado de Terreno de Pelota; otro, “…esto si es el colmo, y todavía critican el potencial técnico de los entrenadores cubanos…”, igual nacionalidad, el mismo sitio. La prensa americana, que le presta poco interés a Chapman de un tiempo a esta parte, y la de Miami que, o reproduce cables, o se apropia del contenido de estos y los convierte en opiniones de “expertos” solo se han dedicado a informar sin mucho comentario y yo diría que ninguno. Al final, el ruego a Dios por el triunfo del “paisano” con: “te deseo lo mejor acere”; “que Dios te acompañe hermano” o “pa’lante Aroldis, que tu eres cubano…” Nadie protege tanto en oraciones, ni invoca al santo como ayuda capital del “hermano” como el cubano de hoy; eso, más que pena, da risa y es una ridiculez.
Aroldis Chapman tiene condiciones para triunfar en Grandes Ligas yo no sé hasta dónde, no es verdad que tenga tantos cambios y curvas que repleten un baúl como leí hace poco: tiene el recurso de una gran recta y un par de lanzamientos que todavía no domina, porque no los puede controlar y esto no es la serie nacional, aquí se necesitan tres lanzamientos o no se puede triunfar. Y, si con esa velocidad no se tira un cambio perfecto o casi, no hay forma humana de que pueda lucir, incluso mantenerse en el nivel de ligamayorista, que Hendrickson la envía a 100, 102 y salió más rápido que su recta de los Marlins aun sin pitcheo profundo ni bullpen de confianza.
El éxito impresionante, rápido y demoledor de Stephen Strasburg ha silenciado a la crónica con respecto al cubano que les está obligando a asumir un compás de espera resignado por un futuro que, como tal, nadie sabe cual será. El joven derecho del Washington gana menos que el oriental y desarrolla más rápido, porque la vida es así y todo el mundo es diferente en su personalidad. Pero Chapman no salió del béisbol colegial, sino de la rotación del equipo castrista como uno de sus tres primeros lanzadores abridores y eso sugiere la diferencia entre un béisbol y otro que, obsoletamente, muchos cubanos de estos tiempos creen superior al de Triple A, incluso que a las Grandes Ligas, lo que ni un loco debería pensar, a pesar de Alexei Ramírez con lo de que no veía ninguna en el colmo de la insensatez militante de la Cuba de hoy.
Chapman será llamado a relevar y si no da la talla lo bajan otra vez y así hasta que cuaje y cumpla o reviente y pierda el cartel como descarte; porque gana mucho dinero y la Triple A es un nivel sólo de salario decoroso, nunca millonario. Esos 30 millones los tiene que justificar como política de trabajo capitalista aunque tenga que lavar a mano todos los autos que parquean en la ciudad de Washington diariamente comenzando por los del estadio. Por eso el club se está moviendo rápido con el criollo en cualquier dirección por descabellada que parezca.
Miami, FL., USA
06/30/2010
No hay comentarios:
Publicar un comentario