BEISBOL ES...PELOTA / DESCARGANDO HASTA EL FINAL (VIII)

MEMORIZANDO CON HUMOR LA PELOTA CUBANA
Por José L. Martel.

La pelota de Cuba gustaba tanto que era como un alacrán picando sin soltar, el león rugiendo en el ruedo, el elefante con su larga trompa o un tigre presto a saltar eran símbolos de los 4 equipos: Almendares, Habana, Cienfuegos y Marianao. Pero la fuerza de la pelota de Cuba se expandió fuera de sus fronteras cuando fuimos los primeros en promover La Serie de Pelota del Caribe. ¿Quiénes fueron sus promotores? Cuba representada por (Armitas y Bobby Maduro, Puerto Rico (Zorrilla), Panamá (Cupas), Venezuela (Prieto y Morales) y un observador de República Dominicana. La reunión se celebró en La Habana y el acuerdo consistía que el equipo campeón representativo de cada país compitiese dentro de una serie amistosa y el ganador se constituía en el campeón del Caribe. Y así fue, Cuba resultó campeón de 1949 hasta 1961y todo terminó cuando donde “llegó el comandante (hoy en desuso)…y mandó a parar”.

Otra participación de los cubanos cuando se constituyeron los Havana Cubans de Bobby Maduro, equipo dirigido por Oscar Rodríguez quien cuando era jugador activo que bateaba con gran facilidad los envíos del lanzador Adolfo Luque. Una noche en el Gran Estadio del Cerro se celebró una gran boda del jardinero de los Elefantes del Cienfuegos y de los Havana Cubans, Roberto Fernández Tápanes con una distinguida dama de la sociedad habanera, Carlota Hevia en 1950. Única ceremonia de este tipo que se celebraba en un estadio en Cuba. Un caso ocurrente fue una discusión de dos mujeres fanáticas que se disputaban elogios directos al lanzador derecho del club Almendares, Rogelio “Limonar” Martínez, un experto en la bola cortalzo. La policía intervino y ambas fueron detenidas mientras un espectador que había presenciado el pleito les gritó: “Tanto polémica por un tipo que es casado y con hijo.”

En una temporada al parecer el Almendares estuvo algo flojo y se escuchó una conversación entre el Dr. Sanguilí y su manager Fermín Guerra. El mentor se quejaba que tenía una guerrilla y los únicos que servían eran el inicialista Rocky Nelson y el jardinero Monte Irvin. La respuesta de su dueño fue: “Oye Fermín ese es tu trabajo de manager sacarle el máximo de esfuerzo a cada jugador”. El equipo rindió frutos con un “Chaflán” Clark repartiendo cuadrangulares y la actuación estelar de Vicente López, con su gran curva y excelente cambio. Sabía Ud. que el lanzador derecho, Octavio Rubert, que venía del Fortuna Sport Club (Liga Amateurs) era tuerto y tenía un ojo de vidrio. Comenzó de relevista con una gran curva que frenaba a los contrarios, mas tarde jugó en las Grandes Ligas.

Se supo de reproche histórico cuando Miguel Ángel González (dueño y manager del Habana) conversando con el cronista deportivo, Fausto Miranda, le dijo: “Compadre, que pifia la tuya no traer a tu hermano, Willy Miranda a mi equipo ¿Qué clase de acróbata es como shortstop y mago en la defensiva? Bueno todos sabemos que hasta los Yankees de New York no paró, que lastima de su bateo, pero fildeando el mejor. Y sobre Willy no lo decimos los cubanos, Phil Rizutto se encargó de esa propaganda.
Otro explotado en el terreno lo fue Reinaldo Cordero. Alfredo Pequeño, asociado al Mariano y siendo su Tesorero-Administrador sostuvo una discusión con Cordero su manager que vociferaba: “Sr. Pequeño, ahora mismo me está botando a esos dos americanos por vagos. Aquí se viene a jugar y no a vacacionar”. Solo se supo cuando Alfredo le respondió “que lástima, Cordero, pues son dos buenos lanzadores que no van hacer falta”. Un gran lanzador del Habana, Vicente Amor.

Los consejos que Claro Duany le dio a Juan Delis, ambos del Marianao, resultaron buenos. En un juego de Marianao vs. Cienfuegos Delis se lanzó al robo de segunda y un tiro certero de Rafael Son Noble lo puso out en manos del torpedero Humberto Fernández. Disgustado y ya en el banco, Duany le dijo: “Sé que le cogiste el tiempo al pítcher pero mi socio, el Negrón de Noble lo que tiene en el brazo es un rifle, mi hermano. Desde que tu salida al robo, sabía que era out por regla.

Si no te acuerdas del Musulungo Herrera, cátcher del Habana, relato esta breve historia en el terreno. La cosa fue con el veloz y jardinero de los Azules del Almendares - Ángel Scull. Le decía Musulungo: “Oye negrito, ahora no puedes estar corriendo “por la libre” ya que me cambiaron para el Habana y yo si tengo tremenda escopeta”. Y Scull medio explotado le dijo: “Fíjate no te equivoques, yo se la robo a Ud., a Campanella de los Dodgers y también a Yogi Berra de los NYC si vienen a jugar aquí con nosotros”.

Tremendo corredor que siempre fue Scull. Y eso lo afirmaban siempre Alfredo Suárez y el Dr. Aballí cuando lo comparaban con Armando Marsans por su gran velocidad en las bases, además destacaban su gran velocidad cubriendo el jardín central y su poderoso brazo. Y para terminar esta reseña de pelota cubana en una ocasión en el banco del Marianao, Adolfo Luque (manager), José María Fernández (coach) y el toletero-jardinero, Roberto Estalella comentaban sobre la nueva adquisición para reformar el cuadro de lanzadores al joven zurdo, Silverio Pérez, conocido como El Torero. Y esto por ahora.

Miami, Florida, USA.
joselmartel@yahoo.com