jueves, 28 de octubre de 2010

JOE GARCIA Y DAVID RIVERA SE DISPUTAN UN ASIENTO EN EL CONGRESO DE EEUU


EN MIAMI ELECCIONES AMERICANAS SIGNIFICAN CUBA
Por Andrés Pascual

Ningún político de cualquier nacionalidad que aspire en Miami; incluso en el Estado de la Florida, está libre de la posición ante el asunto cubano: si se acerca a la tiranía; o si asume una posición de apoyo a la libertad de Cuba, que no es más que hacer la justicia obligada con un electorado que lo perdió todo, incluyendo la vida en cantidades más que generosas o que debieron purgar sanciones bestiales por cumplir el deber máximo con la patria: contribuir a liberarla con la acción. Dolientes sobran…

Hubo una época en que a la Fundación Nacional Cubano Americana se le reconoció como la más formidable maquinaria anticastrista jamás soñada. La Organización entonces la dirigía uno de los grandes líderes por la libertad de Cuba en 50 años, Jorge Mas Canosa.

El líder máximo de la FNCA, empresario exitoso en su vida privada, logró aunar a lo mejor de la lucha contra la tiranía en el grupo; hombres y mujeres decididamente anticastristas para quienes Cuba era un altar permanente estaban allí, codo con codo, con los luchadores dentro de Cuba y en el exilio: Ninoska Pérez Castellón, Roberto Martín Pérez, Feliciano Foyo, Diego Suárez, el Dr. Alberto Hernández y cada preso que salía al exilio desde las mazmorras era atendido y representado. La Fundación brilló tanto como su Presidente y lograron que se les tuviera en cuenta internacionalmente como el verdadero gobierno cubano; aunque exiliado…El tirano le temía tanto como al Presidio Político Histórico Plantado y en igual medida los odiaba.

La sospechosa y prematura muerte de Jorge Mas Canosa en momentos en que más se le necesitaba por las intrigas del partido demócrata en contubernio con algunas figuras de este, encabezadas por el entonces presidente Bill Clinton, por su gabinete y por los representantes de Castro en Miami como Max Lesnick, John Cabañas, Francisco Aruca, Carlos Saladrigas, Álvaro Cifuentes y varios más para resolver los problemas que condujeran al levantamiento del embargo; puso al descubierto dos cosas con respecto al combatiente fallecido: primero, que Mas Canosa, aparentemente, no conocía bien a una parte de su familia y, segundo, que esa parte, con el apoyo en pleno del resto, estaba dispuesta a sacrificar el honor patriótico del padre y a traicionar a la organización sin ningún tipo de escrúpulos.

Entonces se produjo el cisma que llevó a lo mejor del grupo a fundar el Consejo por la Libertad de Cuba, con el mismo espíritu de lucha del grupo inicial que ahora presidía Jorge Mas Santos con varios jóvenes oportunistas, aprovechados y calculadores para los que, como él, la libertad de la patria solo significa dinero invertido para enriquecimiento personal.

De un organismo apolítico que era capaz de trabajar con decencia, seguridad y respeto con ambos partidos por la tragedia cubana, el nuevo grupo de dirección de la FNCA dio un giro de 360 grados y se alineó con el partido que pretende abrirle todos los espacios posibles al castrocomunismo en Estados Unidos.

Para ser más efectivos en la traición “liberaron”, para lanzarlo al ruedo político por el Partido de Obama, a una persona que se hace llamar así mismo “joven de nueva mentalidad ante la tragedia nacional”, elemento de bajo perfil para el exilio cubano; pero, por su capacidad de mentir y de esconder lo que se debe saber, muy peligroso.

En Joe García pusieron dos veces sus esperanzas para un escaño congresional por el distrito # 25 de la ciudad. La primera vez, a pesar del dinero que invirtieron, perdieron abrumadoramente; para la segunda, en cuestión de días, se espera un fracaso más sonado aún ante David Rivera, republicano luchador por la libertad de Cuba.

La campaña sucia del partido demócrata por Joe García, que tenía como objetivo sacar a Rivera para que el nuevo representante del castrocomunismo a través de la Fundación corriera solo, única forma de ganar que concebían, se vino abajo cuando un juez de la Corte de Miami desestimó acusaciones oscuras presentadas por dos elementos casi seguro que elucubradas a nivel de cuartel general de campaña del demócrata.

García no va a ganar porque es un elemento demócrata, el partido que retrocede sin respuestas posibles; porque lo apoyaron Obama y la Pelosi en momentos en que ningún candidato de ese partido quiere ni aparecer retratado con ninguno de ellos y porque no podrá convencer a ningún votante cubano o cubanoamericano de la necesidad de que se le beneficie.

Alguien con quien los peores elementos procastristas, antiexilio y antiamericanos fuera de las fronteras de la Isla como John Cabañas o Álvaro Cifuentes han contribuido con sumas generosas a su campaña. Esto último es “la puntilla” que se ganó este traidor de edición relativamente nueva; así como sus amos en el partido y en la Fundación.

Miami, FL., USA
10/28/2010

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