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miércoles, 11 de agosto de 2010
MC. COLLUM, PROCURADOR GENERAL DEL ESTADO DE LA FLORIDA Y CANDIDATO REPUBLICANO A LA GOBERNACION ESTATAL
BILL MC. COLLUM REVELA CONTROVERSIAL PLAN CONTRA INMIGRACION ILEGAL
Por CRISTINA SILVA
ST. PETERSBURG TIMES
Bill McCollum, procurador general de la Florida y candidato republicano a la gobernación estatal, reveló el lunes un amplio proyecto de ley de inmigración que en algunos aspectos va más allá de la controversial ley aprobada en Arizona para detener a inmigrantes indocumentados.
La medida pudiera colocar a la Florida en la primera trinchera de un caldeado debate nacional sobre la política de inmigración.
"Arizona va a querer tener esta ley'', dijo McCollum. "La nuestra es mejor, más rigurosa y más justa''.
El proyecto de ley exige que los inmigrantes indocumentados porten documentación válida o se enfrentan a un máximo de 20 días de prisión. Además, permite a los jueces imponer condenas más severas a los indocumentados que cometan los mismos delitos que los residentes legales.
La diversidad de la población de la Florida y el elevado índice de desempleo ofrecen condiciones únicas para una ley que pudiera afectar el presupuesto de las instituciones policiales, transformar industrias de bajos ingresos y provocar la ira de funcionarios de justicia federales que ya han calificado de inconstitucional la ley de Arizona.
El liderazgo republicano de la Legislatura estatal está dividido sobre el tema y los legisladores hispanos ha rechazado con fuerza la propuesta. La Cámara de Comercio de la Florida y líderes de instituciones policiales, poco seguros de sus consecuencias potenciales, recibieron la propuesta de formas diferentes.
McCollum anunció el proyecto de ley el miércoles en Orlando, junto con varios representantes republicanos, entre ellos el patrocinador de la medida, William Snyder, republicano por Stuart.
Los que se oponen a la medida la calificaron de una táctica diversionista.
"¿Qué pretende exactamente solucionar esta ley en la Florida?", se preguntó María Rodríguez, directora ejecutiva de la Florida Immigrant Coalition en Miami. "No mejorará la seguridad de la frontera. No solucionará la crisis de ejecuciones hipotecarias. No va a crear mejores empleos''.
McCollum subrayó que la ley prohíbe la discriminación sobre la base de la raza, color u origen nacional, y que la policía ya tenía el derecho a preguntar sobre el estatus migratorio en el cumplimiento de sus deberes''.
La sospecha razonable para preguntar sobre el estatus migratorio incluye una licencia de conducir alterada o que la persona admita que está ilegalmente en el país, dijo.
Pero algunos de los republicanos aliados de McCollum cuestionaron si la ley puede ponerse en práctica.
"Me preocupa que esto
pueda poner en peligro las libertades civiles'', dijo el representante estatal Carlos López-Cantera, republicano por Miami, de familia cubana y coordinador de la mayoría republicana en la Cámara.
Brendon Hensler, portavoz de la American Civil Liberties Union de la Florida, dijo que la organización impugnará la ley si llega a probarse, como lo hizo con la ley de Arizona.
"Va contra los valores estadounidenses obligar a que la policía use el perfil racial en el cumplimiento de sus deberes'', dijo.
La Legislatura de la Florida ha rechazado anteriormente medidas contra la inmigración ilegal, pero el alto nivel de ejecuciones hipotecarias, la crisis económicas y otros problemas fiscales pudieran garantizar que el proyecto de ley sea recibido de manera más positiva durante el período de sesiones del próximo año, cuando se debatirá.
El proyecto de ley, de 29 páginas, es similar a la ley de Arizona en el sentido que obliga a la policía a verificar el estatus migratorio de un sospechoso durante todas las paradas, detenciones y arrestos legales, incluidas las infracciones municipales, cuando exista una sospecha razonable. Un juez rechazó una exigencia casi idéntica en la ley de Arizona el mes pasado.
Snyder dijo que no concuerda con ese fallo.
"Algunas de las cosas sobre las que el juez falló no se cambiarán en nuestro borrador'', dijo.
La medida también copia a la ley de Arizona en que prohíbe la contratación de inmigrantes ilegales en la calle u ofrecerles empleo normal. Mientras tanto, las empresas tendrían que verificar el estatus de todos los nuevos empleados en un programa federal a tal efecto.
Este es un punto que agrada profundamente a los líderes de los que se oponen a la inmigración ilegal, que según ellos roba empleos a los residentes legales y hace bajar los salarios.
"Trabajan por cualquier cantidad de dinero'', dijo Tom Tomlinson, de 66 años y trabajador retirado de la construcción de Palm City, ex presidente de un grupo opuesto a la inmigración ilegal. "No se quejan de no tomar agua. No les dan ninguna prestación. Cuando se lesionan, sencillamente los dejan en el hospital, y entonces los contribuyentes tienen que hacerse cargo de ellos''.
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Definitivamente, de alguna forma el problema de la inmigración ilegal tiene que ser resulto. Muchos han sido los programas migratorios que se han aprobado y puesto en vigor para ayudar a personas de muchas nacionalidades, como por ejemplo los cubanos, nicaragüenses y centro americanos; para resolver sus estatus en los Estados Unidos. Pero aun así, el flujo de ilegales entrando a los Estados Unidos por diferentes vías (las fronteras, mar y aire) es espelúznate. Para mí esto es una falta de respeto a los ciudadanos de este país y a todos aquellos que sacrificada y duramente hicieron un proceso legal para llegar a los Estados Unidos. Si no se implantan regulaciones y leyes más severas, como la ley de Arizona, indiscutiblemente, el alto número de ilegales en nuestras ciudades afectaría mucho más aun la economía local y por ende, la economía general de nuestro país. ¿Y como nos afectan? . . . cuando personas ilegales son contratadas por unos cuantos dólares, dejando sin empleo a “jefes de familias” y residentes legales; y que decir de los que vienen a tener hijos a este país, donde los contribuyentes somos los que pagamos los servicios médicos, la manutención y beneficios que reciben de gratis y que muchas veces todas estas ayudas le son negadas a ciudadanos americanos y residentes legales que realmente también las necesitan. Para concluir, a todos los que se oponen a la regulación de la inmigración ilegal a los Estados Unidos, los exhorto a referirse a otros países del mundo, como España, donde las leyes migratorias son aun mas rigurosas y el maltrato y persecución de ilegales esta a la orden del día, lo cual hace casi imposible sobrevivir ilegalmente.
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