LA RAZON CUBANA DE LA “LA POSICION COMUN”
Por Andrés Pascual
El pueblo de Cuba ni conoce que existe un capítulo permanente de discusión que llaman “posición común” en el seno de la Unión Europea; el que, viéndolo bien, es una especie de caricatura del embargo americano tan ridícula e inoperante como su contraparte de por este lado del mundo…Si la política americana no funciona prácticamente contra la tiranía, ¿Cómo habría de hacerlo esa otra que es un maquillaje hipócrita ante el mundo por lo de las violaciones a los derechos humanos y la ausencia absoluta del carácter democrático en la isla oprimida?
El embargo americano a la dictadura castrista nació como castigo a un ladrón después de que Castro nacionalizó la gran y mediana empresa americana; los americanos, para tratar de aliviar el capítulo de traiciones que han cumplido contra la libertad que muchos cubanos creen que ha estado en agenda primordial como ayuda al pueblo a sacudirse el yugo explotador y criminal, se lo regalaron al exilio para que nos entretuviéramos…Yo soy de los que abogo por mantenerlo como “cosa moral” de aplicación redirigida; pero sé que, como la Televisión Martí, solo es ligeramente más efectivo por la cantidad de dinero que necesita la dictadura para anularlo; de por sí, “del lobo un pelo”.
La llamada posición común es más noble en su esencia; porque se legisló como castigo directo a la satrapía por sus violaciones sostenidas contra los derechos civiles y por la total y absoluta falta de garantías democráticas; pero tampoco es útil, porque solo produce un ligero escozor en el viejo y repulsivo cuero de la dictadura.
Y es que en la Unión Europea hay un gran sentimiento antiamericano y el apoyo al pueblo cubano, contrario a Castro, se identifica con el apoyo a alguien que es proamericano a tiempo completo. Esto ha arrastrado al pueblo de Cuba que lucha por su libertad a crearse la opinión sobre Europa a base de: “a Castro no lo van a abandonar nunca; porque, como buen espécimen contra los yanquis, pues tiene el mismo sentimiento que el grupo de países que produjeron el capítulo cuestionado”
Yo simpatizo con que se mantenga la “posición común” solo porque molesta al desgobierno, que se siente escudriñado por la visión de todo un continente que, en esos asuntos, “se las saben todas”.
Por lo otro que estoy de acuerdo con esa política ante la tiranía es porque, a pesar de lo que dijo hoy la sustituta de Moratinos en la cartera de Relaciones Exteriores de Zapatero de que “estamos esperanzados en que Europa abra el diálogo con La Habana”, para-esto no lo dijo-, que se pueda suspender la política de escrutinio y castigo que tanto molesta al PSOE en pleno, es porque se constituyó en lo único de cierta forma creíble, hasta hoy, haya hecho Europa contra el castrocomunismo… El PSOE es la nota más alta en el concierto protiranía cubana y se manifiesta como el principal apoyo de esta; además, encabeza el grupo que se opone a cualquier medida que la condene sin importarle el pueblo que sufre en la Isla.
La dictadura no se ha pronunciado públicamente solo para dar una imagen diferente de lo que sienten: “que les importa un comino eso”. Ahora, a Castro le interesa más Estados Unidos como socio que Europa y es más proamericano de lo que se pueda pensar digamos que en Madrid o París; claro, es una inclinación a la izquierda liberal y traidora de la política americana soportada por el gran capital de ambos partidos.
Si Castro logra “cuadrar la caja con los yanquis”, va a sacar a patadas por el trasero de Cuba lo mismo a España, que a Francia, que a Italia. Eso, que no lo dude nadie y ya lo están preparando. Después, volverá Europa a ser “nacionalizada sin indemnización”, como ocurrió a principios de los 60’s, hasta con las bodegas de españoles si les han permitido abrir alguna otra. Para la nomenclatura cubana EUA da más que Europa en todos los órdenes y ni hablar de los créditos: con los del Norte, si no paga no importa, porque les va entregar la Isla y lo van a dejar de capataz de la hacienda. A fin de cuentas, Castro no ha dicho una verdad nunca en igual medida que le importa un pito traicionar hasta a su madre, por lo que sería la reafirmación de su actitud histórica de rufián elevado a la categoría sublime; entre otros, por Europa y los Estados Unidos.
Por eso simpatizo con la “posición común” y con el mantenimiento del embargo; con Aznar, con Rajoy y con el PP español en la misma medida que con George W. Bush, con Ronald Reagan o Sarah Palin y con los republicanos en este país, salga el sol por donde salga…
No obstante, también sabemos que esa dictadura está allí porque todavía la sigue el 75 % de ese pueblo al que no le da nada; pero les ofrece apoyo moral en medio de sus envidias y bajas pasiones.
Tomando como referencia a Polonia, a Rumania…si ese pueblo quisiera quitarse esa tiranía de encima no duraban 48 horas en el poder; a pesar de las tropas especiales, del G-2, de las brigadas de respuesta rápida y de los tanques y nadie estaría pendiente de políticas de apoyo o rechazo elucubradas en Washington, en Bruselas o en Suiza para que se resuelva lo que solo está en nuestras manos. Y olvídese del cuentecito del miedo y el terror, que se tiran al mar en una balsa, a veces construida con dos cajas de cartón; o asesinan a una vieja, a un turista o a un cura y desbancan una casa particular con facilidad meridiana y sin ningún tipo de temor.
Miami, FL., USA
10/27/2010
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