LAS DISCULPAS DE LA IGLESIA CATOLICA DEBEN CESAR.
Por: José L. Martel.

Seámos sinceros y hablemos claro con todos los seres humanos de esta Tierra que estamos en peligro y que todos debemos cuidamos estamos más y poner un freno a tantas lamentaciones, disculpas y limpia-culpas de la alta autoridad eclesiástica católica, solo disculpando, disculpando y más que excusando a sus sacerdotes violadores de menores, adúlteros y profanadores de la vida ajena muchos de ellos acusados de hechos criminales que su propia doctrina prohíbe y castiga.

Desde hace siglos de los siglos, católicos culpados y condenados por sus faltas graves cometidas envueltos en grandes y prolongados escándalos que tanto afecta a la fe de creyentes y practicantes son perdonados. ¿Por qué sucede eso dentro del seno de una iglesia tan antigua y que tantos fieles tiene profesando? Ahora está de moda informaciones de los centenares de abusos sexuales cometidos por sacerdotes católicos irlandeses y actualmente repudiados por el Papa Benedicto XVI, pero se hablan de otros cometidos en Alemania y otros lugares del mundo ¿Tendría razón el Padre Alberto Cutié de Miami cuando según la Iglesia Católica violó el Celibato al ejercer el amor divino con una mujer de carne y hueso?

El Padre Alberto no violó, ni abuso sexualmente a ningún menor. Y ¿qué sucedió en Miami? Se formó tremenda algarabía, un gran escándalo de magnitud y de latitudes insospechables, comenzando por los medios de comunicación. Lo contrario sucede con esos escándalos, acusaciones y confesiones de sacerdotes culpables que al ser desenmascarados públicamente, en la privacidad son juzgados por la iglesia y nunca por la justicia de los hombres. ¿Son realmente personas o fenómenos celestiales? Disculpen mi sinceridad en exponer una verdad tan diáfana y limpia como el agua potable que bebemos para vivir.

Cuál es la diferencia de delitos cometidos por un hombre, mujer, adolescente dentro de la sociedad civil juzgados y de ser considerados culpables pagan esas faltas a la sociedad con privación de libertad o con encierro domiciliario más multas y cuando sucede con un sacerdote. Un sacerdote católico comete un falta o delito grave y ¿qué le sucede? Universalmente es penalizado por la justicia divina, ya que la inmunidad los preserva y son ellos lo que juzgan sus delitos. El final en la mayoría de los casos son absueltos, traslados a otras parroquias y más nada sucede. Es justicia verdadera universal.

No solo con disculpas y perdones queridísimo Pontífice Papal Benedicto XVI se resuelven los crímenes y graves males dentro de la Iglesia Católica y romana que Ud. representa como cristiano que somos. Como humano, cristiano y periodista solicito que algo justo, puro y firme debe hacerse. ¿Es que para esos inculpados representantes de Dios existe otro tipo de justicia que los normales que juzgan, condenan y absuelven? Algo está oscuro y pendiente de una explicación a todos por igual.

Solo entiendo que la justicia debe ser pareja para todos los seres vivientes de este mundo. El mundo evoluciona tanto con sus adelantos de nuevas tecnologías que la gente ya no piensa de forma medieval y es que ¿no somos iguales y con los mismos derechos de ser juzgado de forma imparcial y justa? No quiero seguir tocando este delicado punto, controversial y polémico que tanto disgusta a gran parte de la Humanidad. Desearía que otros abordaran estos puntos con una nueva temática que diera luz, sabiduría y una nueva justicia social para todos. Muchas gracias a todos los que interpreten el mensaje que he querido exponer en este breve contenido. Que sólo está dirigido a los sacerdotes culpables ya que sin duda alguna existen buenos sacerdotes que han ofrendado y continúan ofreciendo sus vidas al servicio de Dios y que deben estar abochornados de la conducta impropia de sus culposos y condenables hermanos de la religión.

Para los que cometieron esos delitos no creo suficiente la justicia divina del Vaticano, necesitan ser presentados ante la justicia de los hombres o mujeres que me rigen a mí, a ti y a todos los seres vivientes en este mundo.

Miami, Florida, USA.
joselmartel@yahoo.com